miércoles, 7 de enero de 2009

Carta Circular.

Carta Circular para la
Iglesia Católica Tradicionalista en México
(Diócesis Vetero de México).

Hermanos y hermanas en el Corazón de Jesús:

Cada día vemos como algo más patente como muchas personas de buena Voluntad de la iglesia romana se alejan de sus pastores (obispos y presbíteros) y por ende de su Iglesia, el motivo: El Sacramento de la reconciliación o también llamado Confesión.

Muchos curas romanos han atemorizado tanto tiempo a la gente, que la gran mayoría que todavía recurren a este Sacramento lo hace con miedo. Los que no se Confiesan (Sacramentalmente) es por dos razones:

- En la iglesia romana se les ha prohibido por haber roto una de sus leyes.
- Simplemente porque ven a este Sacramento como algo humillante.

Para la Iglesia Católica Tradicionalista en México el Sacramento de la Reconciliación es justamente eso, reconciliar al hombre pecador (que somos todos según san Juan 1 Jn 1,8) por el Sacrificio expiatorio de Cristo en la cruz y su gloriosa Resurrección.
Cristo mismo perdono pecados a muchas personas:
- El paralítico Lc 5.
- La adultera Jn 8,1--11.
- El ladrón crucificado Lc 23.
- Etc.

Y le dejo a SU IGLESIA la misión de continuar el MINISTERIO DE LA RECONCILIACIÓN.
San Pablo dice que el ministerio de la Reconciliación le fue encargado a los apóstoles 2Cor 5,18.20.
Cristo le dio a los apóstoles el PODER DE PERDONAR LOS PECADOS Jn 20,21-23, cuando soplo sobre ellos. Esto hermanos es símbolo de la Restauración del ser humano al estado original de la Creación, cuando Dios formo del barro al primer hombre soplo sobre el (soplo y Espíritu son traducciones de la misma palabra en hebreo). Cristo quería que mediante el ministerio de la Iglesia, las personas volvieran al estado original de gracia, el cual habían perdido a causa de los pecados, es por ello que Cristo decide entregarles el poder de Perdonar pecados a los apóstoles mediante su soplo.

Los apóstoles tienen el poder de atar y desatar Mt 18,18 dado por Cristo, lo cual significa que pueden perdonar cualquier pecado, siempre y cuando exista un corazón arrepentido.


Para nuestra Iglesia, el Sacramento de la reconciliación es:

- Momento de recobrar la gracia de Dios que hemos perdido por nuestros pecados.
- Recibir la paz de Cristo. (Es por eso que mucha gente después de recibir este Sacramento recobran hasta la salud física y mental)
- Es volver a estar en plena Comunión con toda la Iglesia, la de la tierra (la militante) y la del Cielo (la Triunfante), ya que el pecado nos aísla por su misma naturaleza.
- Renueva en nosotros el entusiasmo por seguir a nuestro amado Redentor y luchar cada vez más en contra del pecado.
- Nos da la capacidad de practicar la humildad al descubrir que todos nos podemos equivocar, así evitados la tentación de creernos infalibles.

El Sacramento de la Reconciliación es:
- Un acto del amor de Cristo por su Iglesia.
- Es recordarnos que el amor de cristo va más allá de nuestros errores y pecados.
- Es redescubrir que el amor de Dios es Eterno.
- Es descubrir que en la Iglesia Católica Tradicionalista en México todos somos hijos de Dios, que todos tenemos la misma dignidad.
- Es el momento en el cual podemos buscar consuelo y consejo, ya que el Sacerdote (Obispo o presbíteros) actúan como doctores (del alma), amigos, pastores y como lo que son SACERDOTES para RECONBCILIAR a las personas con Dios.
- El Secreto es total.
- El requisito es que las personas estén arrepentidas.

Hermanos y hermanas, busquen frecuentemente este bello Sacramento, mediante el cual TODOS NOS PODEMOS ACERCAR AL SAGRADO CUERPO Y A LA SAGRADA SANGRE DE CRISTO.
El Sacramento se recibe de dos formas:
- Confesión ante un sacerdote (la forma clásica por todos conocida).
- Y la forma comunitaria: Al iniciar la Santa Misa se hace un Acto de Contrición y todos reciben la Absolución.
Para que ambas sean validas es necesario solo una cosa: Un serio propósito de dejar el pecado y volver a la hermosa amistad con nuestro Redentor. Cada feligrés tiene la libertad de escoger cualquiera de las dos formas, ya que lo que a la Iglesia le interesa es que la gente experimente el infinito amor de Dios y luchen por cambiar de vidas, el como lo hagan eso depende de cada uno.

El Sacramento de la Reconciliación es motivo de amor, paz y alegría en la Iglesia Católica Tradicionalista en México, la cual, fiel a su identidad Vetero, deja en libertad a sus hijos, para que estos vivan la libertad de ser hijos de Dios como su conciencia les marque.

Les envío un fuerte abrazo y mi bendición.

+ Monseñor Victor Hugo García Cortés
Arzobispo Vetero de México.

No hay comentarios: